Se pueden definir los plenos de Villaviciosa de muchos modos pero no diremos que son aburridos. Cuando menos te lo esperas la oposición viene un día vestida de verde, otro día trae los colores de la bandera republicana en sus ropas y otro se presenta de luto y mostrando unas esquelas en las que se expresa la muerte del estado del bienestar en nuestro país. Nuestros políticos municipales no cabe duda de que son una caja de sorpresas.
Los que se mantienen más en su línea son los miembros del equipo de gobierno, en la línea de sólo apruebo lo que yo propongo, o esto no lo apruebo aunque no me oponga, o esto me gusta pero me opongo, o ustedes son unos aprovechados porque proponen algo que yo iba a hacer pero… como lo han propuestos ustedes pues sí, yo voy y me opongo… Funcionan así, a piñón fijo.
Además, para que no decaiga el interés del público asistente a los mismos (que cada vez, por cierto está siendo más participativo) de vez en cuando, nuestro respetado alcalde, se descuelga con alguna de esas sentencias que le hacen tan peculiar: “si quieren ser hooligans dedíquense a ir a los partidos de fútbol”, “me parece inconcebible su postura pero la respeto, obviamente”, “no nos oponemos a hacer un pleno de este tipo porque tiene todo el derecho a pedirlo”, “desde que empezó la legislatura no ha dejado de darme la chapa con eso”,… y muchas más sentencias que dejan ojiplático al personal pero que hacen muy peculiares los plenos municipales de Villaviciosa de Odón.
Como siempre empezamos con las aprobaciones de las actas de plenos anteriores y últimamente ni en esto están de acuerdo el equipo de gobierno con los miembros de la oposición. Y se puede decir que también “como siempre” se plantea la aprobación de nuevos reconocimientos extrajudiciales de nuevo para pagar asuntos no tan “imprevistos” como “mal previstos”, que no es lo mismo.
En este pleno la notable novedad han sido las dos mociones del PP, una de ellas elaborada por una asociación de nuestro municipio y la otra elaborada por el propio equipo de gobierno que no tiene tiempo ni ganas para hacer propuestas en el pleno porque por si alguien no se acuerda, el equipo de gobierno “gobierna”, algo que nos recordó puntualmente el alcalde y el portavoz de este equipo de gobierno tan respetuoso con las herramientas municipales más democráticas como podrían ser las sesiones plenarias de un ayuntamiento.
Como era de esperar las dos salieron adelante con los votos de la mayoría que forma el pacto de gobierno, PP y PPVO, da igual la congruencia de los argumentos a la hora de defender cualquiera de las dos, da igual la necesidad que plantea el municipio de mociones tan “imprescindibles” como cualquiera de las dos. Todo eso le da igual a la mayoría aplastante del equipo de gobierno, estas cosas nos confirman que sí, que a veces los políticos que nos gobiernan viven realidades paralelas con respecto a los ciudadanos a los que gobiernan, los ejemplos se suceden en Villaviciosa de Odón, en la Comunidad de Madrid o incluso en el país. Las pruebas son irrefutables e incontables.
Todas y cada una de las propuestas de la oposición rebotaron contra el muro del NO presentado por el equipo de gobierno, como decía extrañado un señor entre el público sentado muy cerca de quien escribe: “¿Aquí es que no aprueban nada?”. No sé qué me sorprendió más si su ingenuidad a la hora de pensar en la tolerancia del equipo de gobierno o que de repente sonara Joaquín Sabina en su móvil hasta que él mismo, bastante azorado, pudo apagar el aparato. Ya os digo que los plenos en Villaviciosa de Odón no tienen desperdicio, una pena que sean a las diez de la mañana y no podáis acudir todos los que querríais o podríais hacerlo por la tarde, por ejemplo.
Por supuesto las propuestas que llevábamos desde Izquierda Unida no fueron una excepción, los recortes sangrantes en la educación pública española no son más que pequeños arañazos para nuestro equipo de gobierno y de EuroVegas mejor no hablamos porque como no sabemos nada, como todavía no hay nada decidido, como no se sabe donde se va a ubicar… pues para qué preocuparnos, mejor nos preocupamos cuando ya no se pueda hacer nada.
Sesiones plenarias en las que la democracia, la participación, la tolerancia, el respeto a las minorías, la capacidad de escuchar y compartir propuestas, la capacidad de discutir sin insultar, brillan por su ausencia. La mayoría ha decidido que tiene mayoritariamente la razón y la oposición se queda únicamente con lo que le dejan, el recurso del pataleo. Esperemos que entre todos consigamos al menos que la ciudadanía sea consciente de lo que se está cociendo en el ayuntamiento y tomen cartas en el asunto allá por el 2.015… si no es antes.
laprimeraalaizquierda 